Sergio Ruiz/pressinphoto/Sipa USA
pressinphoto/Sipa USA
A falta de la confirmación de la FIFA y la UEFA, el partido Villarreal vs. Barcelona de la jornada 17 de la liga española se jugará en Miami.
El lunes LaLiga y la RFEF aprobaron que ese encuentro, programado para efectuarse el 21 de diciembre en el Estadio de la Cerámica, se jugase el 20 de diciembre en el Hard Rock Stadium de Miami Gardens.
Si bien jugar el primer partido de liga fuera de España presenta muchos aspectos positivos, no faltan las voces que se opongan a esta decisión, sobre todo aquellos que no forman parte de esta fiesta.
El primero es el Real Madrid, que este martes sacó un comunicado manifestando su postura del desafío por “alterar el equilibrio competitivo y otorgar una ventaja deportiva indebida a los clubes solicitantes”, principalmente porque su archirrival, el Barcelona, no tendría la presión de ser visitante como la tendría en La Cerámica.
“El Real Madrid quiere manifestar a sus socios, simpatizantes y aficionados al fútbol en general su más firme rechazo a la propuesta de disputar fuera de España el encuentro correspondiente a la jornada 17 del campeonato nacional de la liga de primera división entre el Villarreal y el Barcelona”, reza la primera parte del comunicado.
Sin embargo, tanto el Barça como el Villarreal están encantados y espera que la FIFA primero y la UEFA después le den el “OK” para celebrar el histórico partido en Estados Unidos, que a su vez estará encantado de acoger un partido no amistoso entre dos de los grandes de la liga española.
En Estados Unidos ya es una costumbre que equipos de sus principales ligas deportivas, como NFL y NBA, realicen partidos oficiales en el extranjero.
De hecho, los Dolphins de Miami van a jugar como local en la casa del Real Madrid su partido contra los Commanders de Washington, que se celebrará el 16 de noviembre de 2025 en el estadio Santiago Bernabéu.
El presidente de Villarreal Fernando Roig consideró que es una gran oportunidad para su equipo y LaLiga “dar a conocer el producto y expandir mercados” y anunció que el socio del club que quiera ir al encuentro viajará gratis a Miami.
Esta es una vieja idea del presidente de la liga española Javier Tebas, quien ha viajado varias veces a la Capital del Sol para traer un partido oficial a Miami.
La FIFA dio luz verde a este proyecto de jugar un partido regular de una liga fuera del país que la acoge, con lo cual parece que el Villarreal-Barcelona se disputará en la casa de los Dolphins, que enfrentarán al dia siguiente el domingo 21 (8:30 p.m.) a los Bengals de Cincinnati en el mismo recinto.
A la espera de la aprobación definitiva de la FIFA y la UEFA todo hace indicar que finalmente se disputará el partido en Estados Unidos, con lo cual el gran número de seguidores del club azulgrana, mayor que del Submarino Amarillo, en esta nación estará encantado.
Que Miami sea de nuevo la ciudad elegida no solo es un privilegio, sino más bien la confirmación de que se está convirtiendo hace rato en la capital del fútbol mundial.
